Dos estudios recientes indican una correlación entre el aceite de pescado y la función cerebral, tanto en términos de mantener la salud cerebral y las capacidades cognitivas durante el envejecimiento como en el aumento de la recuperación después de un accidente cerebrovascular.
Según una investigación del Centro de Enfermedad de Alzheimer y Trastornos de la Memoria del Hospital de Rhode Island, tomar suplementos de aceite de pescado contribuye tanto al proceso de envejecimiento como a la salud diaria del cerebro. El estudio siguió a más de 800 pacientes, examinándolos periódicamente y realizando resonancias magnéticas.
- Las personas que dieron negativo en los factores de riesgo genéticos de la enfermedad de Alzheimer.
- Pero consumieron suplementos de aceite de pescado.
- Obtuvieron puntuaciones más altas en las medidas de funcionamiento cognitivo durante el estudio de tres años.
Más importante aún, los investigadores encontraron que el consumo de aceite de pescado tenía una clara correlación con el volumen cerebral. Los pacientes que tomaron aceite de pescado experimentaron menos encogimiento cerebral que los pacientes que no tomaron suplementos de aceite de pescado. Esta falta de estrechamiento se ha observado especialmente en la corteza cerebral y el hipocampo, que son vitales para la memoria y el pensamiento crítico.
En otro estudio realizado por la Universidad Laval en Canadá, los científicos observaron que el daño cerebral inducido por accidente cerebrovascular se mitigó con una dieta rica en ácidos grasos omega-3 tipo DHA. Las pruebas se realizaron en ratones alimentados con una dieta que contenía DHA durante tres meses antes de Después del accidente cerebrovascular, estos ratones mostraron una reducción del 25% en el daño cerebral en comparación con los que no usaron DHA.
Los investigadores atribuyeron esta disminución en el daño cerebral a la capacidad del DHA para reducir los efectos inflamatorios del ácido araquidónico, un ácido graso omega-6 poliinsaturado, y por lo tanto recomendaron una dieta rica en DHA o el consumo de pescado.
Los científicos de ambos estudios señalaron que estos resultados positivos indicaron la necesidad de realizar más estudios a largo plazo sobre los beneficios positivos de la suplementación con aceite de pescado, particularmente dada la ausencia de efectos secundarios y los bajos costos.